sábado, 26 de mayo de 2012

Que aproveche


no lo dudes si estás hambrienta come de mi carne lo que apetezcas
¿acaso está demasiado hecha para tu gusto? es un barato menú del día

mastica sin mirar la pila amontonada de laceraciones caducadas
sobre las facturas vencidas y devueltas a las acreedoras flores muertas

come no tengo otra cosa que ofrecerte ¡ah, sí! luego podrías
soplar sobre una taza de café recalentado con mis últimas brasas

lo beberás y dejarás los posos para la improbable siguiente
o para la anterior si acaso volviera de la sirga en la vieja ciénaga



1 comentario:

Francesc Cornadó dijo...

Hay apetitos que matan.
Salud
Francesc Cornadó